Experimentos divertidos

Una de las partes más divertidas de la ciencia y de los experimentos es no saber nunca qué y cómo va a ocurrir algo. Esas ganas de ver los resultados, de afrontar los errores y procurar superarlos, esas sorpresas que suceden y que entusiasman a los niños, esa posibilidad de jugar y poder experimentar con cosas interesantes y con el permiso y bajo la supervisión de los mayores…La ciencia es un auténtico reto para los más pequeños, y los experimentos la forma más divertida y amena de que puedan enfrentarse a esa compleja disciplina y aprender cosas muy valiosas de forma entretenida.

Por eso en esta sección queremos presentar los experimentos más divertidos y locos que pueda haber para practicar en casa o para hacer en el cole. ¡Echa un vistazo y comienza a experimentar el lado más divertido de la ciencia con tus pequeños científicos!

Los proyectos de ciencias pueden ser realmente emocionantes, especialmente cuando despiertan el lado más divertido y curioso de los niños con su originalidad. Hoy en día sabemos que los niños se sienten más inclinados a entretenimientos como Internet, los juegos del móvil o las redes sociales, lo cual aleja a los más pequeños de ese instinto natural de la infancia del movimiento, el descubrimiento y la experimentación.

Por eso es muy importante que padres y profesores se pongan en marcha y potencien juegos y actividades más creativas, que puedan alejar a los niños de la “esclavitud” y el sedentarismo de las nuevas tecnologías, y hacer renacer otros intereses más activos y productivos. En este sentido, los experimentos científicos divertidos y sencillos pueden ser una buena alternativa y una apuesta segura con la cual captar el interés de niños y niñas. Además, un buen proyecto o experimento científico incluye muchas áreas de trabajo y de aprendizaje, como la lectura, el desarrollo del pensamiento lógico, la escritura, la gramática y la ortografía, las matemáticas, el análisis estadístico y de datos, la informática y las artes gráficas o la propia metodología científica, lo que sin duda son múltiples beneficios a añadir.

Y por si esto fuera poco, los experimentos científicos y divertidos para niños ayudan a desarrollar un sentimiento de confianza y competencia entre los más pequeños, pues aprenden a despejar incógnitas y a superar retos complejos, y les ayudan a potenciar su espíritu de investigación científica y su capacidad de motivación y autoaprendizaje.