Juana I Castilla

Reina de Castilla y Aragón

• Juana I de Castilla, que más tarde sería apodada ‘Juana la loca’, nació el 6 de noviembre del año 1479 en Toledo. Era la tercera hija de los reyes católicos de España. Fue educada como una princesa, aunque se mostró indiferente ante la religión y su formación real, algo que preocupaba seriamente a su madre, la reina Isabel la Católica.
• En el año 1496 sus padres la casaron con el archiduque Felipe, apodado ‘Felipe el hermoso’, quien era el primer hijo de los monarcas de Austria. Este matrimonio se celebró para fortalecer la política internacional de sus padres.
• Cuando sus hermanos murieron, ella y su esposo fueron declarados reyes de Castilla y Aragón, pero pronto se rumoreó que Juana empezaba a mostrar signos de sufrir una enfermedad mental, lo que complicó mucho su reinado.
• Como supuestamente Juana no estaba en condiciones para ser reina, su padre y su esposo formaron un gobierno conjunto para gobernar Castilla y Aragón, pero su esposo y su padre empezaron a  tener grandes diferencias e intereses, así que su padre se alejó de la corona para evitar una guerra civil y todo el poder recayó sobre el rey Felipe.
• A los 28 años y después de haber tenido seis hijos, el rey Felipe murió. Como a Juana la habían apartado de la posibilidad de reinar, el rey Fernando volvió y se hizo cargo del trono hasta que el primer hijo varón de Juana, Carlos, tuvo edad suficiente para hacerse cargo de la corona.
• Juana continuó teniendo el título de reina aunque nunca ejerció como tal debido a la negativa, principalmente, de sus familiares.
• Los últimos años de su vida los pasó en Tordesillas junto a su hija Catalina, su única compañía, hasta que esta tuvo que marcharse para casarse en el año 1526.
• Sus seis hijos se habían casado con diferentes monarcas, de manera que la corona de Castilla y Aragón se había expandido gracias a esos matrimonios. Sus hijas fueron reinas de Portugal, Hungría, Dinamarca y Francia.
• Finalmente quedaría recluida en Tordesillas hasta su muerte.
• Murió el 12 de abril del año 1555, después de haber sido recluida durante 46 años conservando hasta entonces su título de reina.