El Psephoderma tampoco era en realidad un dinosaurio, sino más bien una tortuga prehistórica (placodonte). Su nombre significa “piel áspera” y fue parte del grupo de los placodontes, donde abundaban otras tortugas y reptiles, cada uno de ellos con su propia forma única y distintiva en sus cuerpos.
Se cree que el Psephoderma vivió en los mares alrededor del sur de Europa entre hace unos 223 y 209 millones de años. Pesó unos 180 kilos y debió medir como máximo un metro y medio. Tenía además una concha en su espalda, otra sobre sus caderas y un pico, y su dieta debió estar compuesta por la ingesta de determinados mariscos.