El Tylosaurus fue un dinosaurio acuático perteneciente al período cretácico, y mucho menos conocido que otros dinosaurios de esta época. El Tylosaurus pudo ser un descendiente de un dinosaurio anterior, el Ichthyosaurus, y fue uno de los mayores carnívoros que habitaron en los océanos de la Tierra. El tamaño de este dinosaurio era descomunal, pues pudo sobrepasar los 12 metros de largo, y fue un animal muy fuerte y muy rápido.
Sus primeros restos se hallaron en la zona de Kansas (EE.UU.) entre el 1870 y 1879 y, aunque la mayoría de ellos han sido hallados en América del Norte, también se poseen algunos restos hallados en zonas como Nueva Zelanda. Gracias a esos restos fósiles se sabe que la forma del Tylosaurus pudo no estar demasiado avanzada para habitar el océano, puesto que poseía una especie de patas palmeadas que pudieron hacerle algo torpe, lo que pudo contrarrestar muy probablemente con su gran velocidad. A su vez, y para poder alimentarse, tenía una forma en la nariz ideal para embestir a otras especies marinas y poder comer sin demasiados problemas.
