¿Quién inventó la máquina de vapor? Pues veréis, amigos, como suele ocurrir con muchos de los inventos de la historia…lo cierto es que la máquina de vapor se fue desarrollando poco a poco, y dar el reconocimiento a una persona en concreto sería robarle mérito a muchas otras que participaron en el proceso.

La máquina de vapor es una máquina que utiliza vapor de agua hirviendo para moverse, y dicho vapor empuja las partes de un motor para que se mueva. Pero, ¿quiénes la desarrollaron entonces?

 

Los descubridores de la máquina de vapor

 

Dicho desarrollo duró nada menos que unos cien años, y del mismo formaron parte tres inventores británicos:

Uno de ellos fue Thomas Savery, a quien se le debe la primera máquina de vapor crudo, construida en Inglaterra en el año 1698. Savery construyó su máquina para ayudar a bombear agua de las minas de carbón. Esta máquina era tan simple que no tenía partes móviles, y además usaba muchísimo carbón solo para bombear una pequeña cantidad de agua. Por ello, decir que era una máquina de vapor en el sentido de hoy en día sin duda sería errar, pero sí que fue un importantísimo comienzo.

El siguiente personaje destacado en la contribución del descubrimiento o desarrollo de la máquina de vapor fue Thomas Newcomen, también originario de Inglaterra. Newcomen sabía que debía haber una manera de mejorar la ineficiente bomba de vapor de Savery, y construyó una máquina donde el vapor realmente empujaba un pistón móvil en una dirección. Esta verdadera “máquina de vapor” también se utilizó para bombear agua de las minas de carbón, y lo cierto es que ni Newcomen ni Savery tenían en mente algo mucho mayor.

Nuestro tercer personaje es James Watt, un ingeniero escocés que se propuso mejorar el modelo de Newcomen y al que se considera muchas veces el inventor de la máquina de vapor de manera oficial. Watt descubrió una manera de empujar un pistón hacia adelante y hacia atrás en su cilindro en el año 1763 y, lo más importante, descubrió una manera de hacer que este movimiento de ida y vuelta girara una rueda. Al usar un “cigüeñal”, la máquina de vapor podía producir un movimiento circular, lo que hizo que inventase (sin proponérselo) la primera locomotora de ferrocarril.

Desafortunadamente, Watt no tuvo los medios económicos para poder desarrollar de forma mejorada su motor de vapor, aunque sí pudo convencer a un fabricante inglés de que construir máquinas de vapor podría convertirse en un negocio muy rentable, y gracias a este nuevo socio comercial fue como James Watt comenzó a construir máquinas de vapor. Sin saberlo, su nueva máquina de vapor iba a cambiar el curso de la historia, y no solo para los transportes, sino también para la futura Revolución Industrial.

 

La máquina de vapor, un gran descubrimiento para el mundo

 

Los motores de vapor impulsaron grandes barcos como el Titanic, trenes, coches…fue algo muy recurrido y popular que, de hecho, aún no ha sido reemplazado del todo.

El paso de la máquina de vapor, adaptada a los ferrocarriles, se había dado en 1829 con el ingeniero inglés George Stephenson, aunque ya había sido incorporada a barcos de pasajeros en el año 1807 gracias a Robert Fulton, y por ello el Titanic, que viajó en 1912, ya lo tenía más que incorporado.

La máquina de vapor, en definitiva, fue un gran descubrimiento fruto de muchos años de evolución, que había nacido para impulsar transportes y para dar energía, aunque con el tiempo iría siendo sustituida por el llamado motor de combustión, entre otras cosas por el alto nivel de contaminación del carbón.

 

Otras curiosidades sobre la máquina de vapor

 

  • Las primeras máquinas de vapor fueron motores de pistón que funcionaban a baja presión y tenían que ser muy grandes para generar mucha potencia.
  • En una máquina de vapor el carbón se quema para calentar el agua y convertirla así en vapor, pero en lugar de dejar que el vapor desaparezca en el aire, se captura y se utiliza para alimentar una máquina.
  • En las primeras máquinas de vapor, inventadas por Thomas Savery y Thomas Newcomen, se necesitaba quemar mucho carbón para funcionar, lo que las encarecía demasiado, algo que solucionaría finalmente James Watt, como hemos tenido ocasión de ver.
  • Hace mucho tiempo, la única forma en que la gente podía viajar era a pie o a caballo, y esto hacía que viajar fuera muy difícil. Sin embargo, gracias a la invención de la máquina de vapor, la gente ya pudo viajar mucho más rápido y de una forma mucho más cómoda y eficaz.
  • Así mismo, en la Revolución Industrial, la máquina de vapor reemplazó otros sistemas como el de la utilización de caballos, o de molinos de viento y de agua, por nuevas máquinas de trabajo.

 

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