Se alargan los veranos

Se alargan los veranos

Nueva colaboración de Pilar Holguín González con una tierna y preciosa historia que pretende concienciarnos sobre la importancia del agua y del medio ambiente. Una historia que no debes perderte, con un final lleno de esperanza y de ilusión por un mundo todavía mejor.

 

Cuento infantil: “Se alargan los veranos”

 

¡Hola amigos! Me llamo lluvia y soy una gota de agua. Estoy aquí arriba, sentada en una pequeña nube. Miro hacía vuestro planeta y veo cómo se va secando poco a poco.

Me siento muy triste porque muchos seres vivos dependen de mí y de mis amigas las gotas de agua para sobrevivir, y pensaréis: “¡Bah! eres insignificante, una gota de agua no sirve para nada…”.

Y tenéis razón, yo sola no puedo hacer mucho. Pero antes de que algunos humanos quemasen a nuestros amigos los árboles, que unidos formaban bosques, ellos nos proporcionaban el medio de formar grandes nubes.

Las nubes están cargadas de millones y millones de gotas de agua como yo, y cuando somos tantas que no pueden con nosotras nos dejan caer y vamos a parar a los mares y los ríos. También caemos sobre los campos plantados y regamos los árboles.

Muchas de nosotras formamos charcos en las calles, y niños como María y Leo se ponen sus botas de agua para jugar.

Cuando aquí arriba hace mucho frío caemos en forma de nieve y adornamos de blanco vuestras navidades. Pero ya cada vez hay menos árboles y es posible que el próximo mes de diciembre estés en la playa celebrando la Navidad, y también es posible que dentro de algunos años solo podáis ir a la playa a jugar con la arena, porque el agua se irá evaporando con el sol. Qué triste, ¿verdad?

Sí, me llamo lluvia y solo soy una gota de agua, pero si ahora me dejase caer y al resbalar por una hoja un pájaro me viese, podría calmar un poco su sed.

Si cayese en la calva de Manolo, que es agricultor, empezaría a dar saltos de alegría pensando que va a llover y se regarán sus campos. Si yo, una sola gota, daría tanta felicidad… ¡imaginaos un buen chaparrón!

Por eso os voy a pedir ayuda a vosotros, mi nueva generación: plantad árboles, cuidad de vuestro planeta, ¡y muy pronto podré saludaros!

 

lluvia-nube

 

 


Más contenidos


Enviar comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *